
Cierro los ojos porque quiero pensar en ti, así soy capaz de concentrarme mucho para sentirte. Voy recordando tu forma, tu voz, tu manera de dormir bajo tu techo de estrellas, de estar alegre cuando tu perrita te mira. No quiero abrir los ojos y pongo Claro de Luna de Debussy; noto que se arruga la frente y comienzan a abrirse imágenes, a danzar en nostalgia por mi cabeza recorriendo los lugares, los años, las horas... y siempre estamos juntas.
Ahora broto, nazco en cada segundo que pienso en ti, como si me diera vida saber que estás, que me quieres, que puedo hablar contigo ahora mismo si quisiera, que mañana puedo abrazarte, darte regalos, ver como cuidas los peces, ordenas tu ropa y peinas la coleta de la Iru.
Me gustaría invitarte a mi paseo por tu imagen, que me sientas este amor que te tengo. ¡Corre!, vente rápido a este viaje, cierra tú también los ojos y dame la mano. ¡Vámonos!
Siempre cantaré para ti mis canciones inventadas.