26/9/12

Minúscula vida


No debí consentirlo, no era natural que estuvieras tan encerrado. Pero la locura siempre es más fuerte que la lógica y en ese momento de negrura y zumbidos, la invasión de tu sonido y tu pequeña presencia me aliviaron el alma. Ahora ni estás aquí, ni estás en el cielo. Dónde te busco entonces. Vuelvo a quedarme quieta, a ser árbol, a ver si así te posas.

Ilustración: Nicoletta Ceccoli

8/9/12

Descanso


Por fin,
la noche vuelve
a dormir.


Ilustración: Majalis