
- Depende.
-¿De qué?
- De si es lluvia sucia o lluvia limpia. Tienes que esperar a que caigan las primeras gotas y luego puedes beber.
- Ah, vale.
- ¿El agua de lluvia quita la sed?
- Creo que no, sólo moja.
- A mí no me moja...
- Será porque hay sol.
- Ah.
- ¿No te dan miedo las tormentas?
- No, ayer mismo me cayó un rayo.
- Vaya. ¿Qué se siente?
- Como un temblor.
- Ah.
- ¿Nos vamos a casa?
- Espera. Quiero beber lluvia, pero no sé mirar para arriba, cerrar los ojos, abrir la boca y andar al mismo tiempo.
- Entonces te espero... ¿Has visto el arcoiris?. Qué bonito es.
- Sí, pero sólo hay medio, ¿dónde está el resto?
- Tras las nubes, supongo.
- Ah. ¿Nos vamos a casa?
Ilustración: Blanca Gómez
4 comentarios:
Tampoco me parecen preguntas tan tontas...
Muy bueno.
Saludos,
YoMisma
Más que tontas, inocentonas, :).
Besos y buen fin de semana.
Lo peor de las preguntas tontas en intentar darles respuestas inteligentes. Por ejemplo, ¿a qué huelen las nubes? Pues te lo digo, huelen igual que la tierra mojada, a iones que se separan de la molécula del agua y como son muy volátiles desprenden ese olorcito tan rico....
La inocencia anida en aquello que no conocemos...
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